Páginas

12 de julio


 San Mateo 11,20-24

El Evangelio nos relata cómo Jesús recrimina a aquellas ciudades que no han creído en los milagros que Él ha realizado y pone como ejemplo ciudades consideradas como impuras, si allí se hubieran hecho los milagros, realmente hubieran creído.

Esto para nosotros es un mensaje clave y preciso saber que cada acción del Señor tiene que ver con una respuesta a nuestra fe. La fe que nos permite creer en su Presencia y que Él haga posible lo imposible.

Esta Palabra del Señor nos tiene que llevar a reflexionar cómo estamos viviendo nuestra fe, como la cultivamos en lo cotidiano, qué hacemos para acercarnos más al Amor del Señor y no quedarnos sólo en los milagros sino ir a lo profundo donde Él nos muestra el Camino verdadero, camino que se hace Vida para nosotros.

Por eso pidamos al Señor la Gracia de creer en los signos, en los milagros que va realizando cotidianamente; que al final de cada día podamos repasar y descubrir cómo el Señor ha obrado y cómo mostró su Presencia para nosotros y quienes caminan a nuestro lado.

Que el Señor sea luz y guía en el camino de la vida y quiera Dios que no nos pase como a estos pueblos a quienes Jesús les recriminó la falta de fe. Que podamos ser hombres y mujeres de fe.